ONCE UPON A TIME

Erase una vez...

Como podéis observar no tengo criterio a la hora de ver lo que sea (series, pelis y hasta anuncios de tv), y aquí tocamos otro palo más, serie de  fantasía.

Lo importante es divertirnos, no es necesario que tras unos minutos de sencillo entretenimiento nos sintamos obligados de disertar con nuestro amigos sobre los procederes del alma y las consecuencias de las malas acciones (ya sabéis, el gafa-pastismo que está de moda).

Que no! que no! Aquí buscamos entretenimiento y diversión lo mas infantil y sencilla posible.

Sí! chicos, el viejo sistema funciona: los malos son malos y hacen cosas malas, los buenos, NO!

Y que lo sepan los malos, por si aún no lo sabían, al final van a perder. Esto ocurre desde el principio de los tiempos y es la fórmula que funciona.

Esta serie tiene para sorprendernos todo un cocktail fantástico donde mezclamos realidad y  ficción mientras nos dejamos arrastrar a un maremagnum de entretenimiento.

Y no os cuento más que quiero que la veáis, lleva solo dieciocho capítulos y se ven volando.

Once upon a time: para todos los adultos que aún siguen siendo niños.